Mediterráneo.

El elemento principal de las obras más exitosas de Sorolla en los grandes salones fue el mar mediterráneo. Fue el escenario de sus recuerdos familiares más felices, que recoge en escenas cargadas de jovialidad, ternura y serenidad, pero también fue el escenario de asuntos relacionados con el trabajo. Sintió un gran interés por las faenas de los marineros y pescadores que llegaban al puerto de Valencia, lo cual plasma en obras en las que la experimentación con la luz se hace cada vez más evidente y arriesgada.

Esta cuestión se ve de forma clara en la serie de pinturas que pintó en Jávea en el verano de 1905, en las que prescinde prácticamente por lo completo de la corporeidad de las figuras para centrarse al cien por cien en el carácter dinámico y cambiante del mar en sus diferentes horas y movimientos y los efectos que produce la luz sobre su superficie del agua.

Estas obras ya desde el momento en el que las pintó tuvieron una gran aceptación y fueron protagonistas de la gran retrospectiva sobre Sorolla que se celebró en 1906 en la galería parisina Georges Petit, una de las más importantes que se hicieron durante su juventud. Supuso el inicio de una carrera imparable por todo el mundo, que culminó en su encargo más importante, el encargo de los murales de la Hispanic Society en Nueva York en 1911.

The main element of Sorolla's most successful works in the great salons was the Mediterranean Sea. It was the setting for his happiest family memories, which he depicted in scenes full of joviality, tenderness and serenity, but it was also the setting for work-related themes.

He took a great interest in the work of the sailors and fishermen arriving in the port of Valencia, which he expressed in works in which experimentation with light became increasingly evident and daring. This is clearly seen in the series of paintings he painted in Jávea in the summer of 1905, in which he dispensed almost entirely with the corporeality of the figures to focus one hundred percent on the dynamic and changing character of the sea in its different times and movements and the effects produced by the light on its water surface.

These works were very popular from the moment he painted them and were the subject of the major retrospective on Sorolla held in 1906 at the Georges Petit gallery in Paris, one of the most important exhibitions held during his youth. It marked the beginning of an unstoppable career all over the world, culminating in his most important commission, the commission for the murals of the Hispanic Society in New York in 1911.

Anna Belluncci 🌏🌍🌎♻️🕊⚖️